Colegio Villa María

Carta de MARÍA LORETO LIOI SOTOMAYOR

El Mercurio 6 de abril de 2009.

Señor Director:

Al igual que M. Teresa Cremaschi, llevo 14 años despidiéndome de mi hijas que van al colegio Villa María cada mañana, una ya ex alumna y la otra todavía en básica.

También soy ex alumna y siento que el colegio me marcó como mujer y ser humano, al igual que a todas las ex alumnas. Concuerdo en casi todo con ella, pero estoy completamente en desacuerdo en creer que es una ilusión pensar el Villa María sin las sisters.

Es cierto, será un colegio distinto, espero y confío que aún mejor, pero no podemos olvidar que justamente lo que las sisters nos han inculcado a través de toda nuestra educación, partiendo por los constantes cambios de curso, algo novedoso en esos tiempos, cambios continuos de las directoras y las mismas sisters que venían a Chile por un período y luego tenían que irse y llegaban nuevas a reemplazarlas, es que la vida es cambio, que no podemos aferrarnos a las cosas ni a las personas, que los cambios son oportunidades que tenemos que aprovechar para mejorar y no estancarnos.

Si las sisters tomaron esta difícil decisión, confiemos en su criterio, el mismo que ha logrado hacer del colegio lo que es, y pongamos nuestras energías en construir este nuevo Villa María para demostrar una vez más que todo lo que ellas nos han enseñado no fue en vano, que somos adultas y que podemos seguir el camino que nos han marcado, que nuestras hijas e incluso nietas tendrán el privilegio de pertenecer a esta gran comunidad de mujeres heterogéneas, positivas, alegres, inteligentes, trabajadoras e innovadoras, que donde estén ponen un sello, el sello que les dejó el haber pasado por nuestro querido Villa María Academy.